La segunda entrada de este blog se aleja de las películas de indígenas canibales para situar la acción en plena Europa, en una pequeña isla griega del mar Egeo. Unos "pijos" (para la época) arriban a la isla en un yate y sorprendidos descubren que se encuentra totalmente desierta. Muy pronto descubrirán la terrible explicación. Un perturbado con un aspecto aterrador y con un insaciable apetito por la carne humana se ha comido a todos sus habitantes. Y el próximo plato serán los desafortunados turistas.
Película italiana (que grande el cine italiano de los setenta y principios de los ochenta) dirigida por el inefable Joe D'Amato en 1980; director de grandes títulos gore/terror como "Bucio Omega" o sexplotations extremas como "La noche erótica de los muertos vivientes". Este film es sin duda una de las películas con escenas gore más fuertes de toda la historia del cine: el canibal se come un feto que arranca de la placenta de una mujer aún viva o al final, antes de morir, devora sus propios intestinos cuando le salían del vientre. El antropofago, el actor Geoerge Eastman, nick americanizado de Luigi Montefiori, su verdadero nombre, está impresionante, da verdadero miedo y eso que no dice una palabra.
El ambiente de la película es malsano y febril; el gore es desagradable, no tiene nada de cómico ni de histriónico. A veces el ritmo es lento pero tiene escenas memorables como las relatadas y la parte de las catacumbas es realmente claustrofóbica y terrorífica.
Los aficionados al cine canibal disfrutaran con las pantagruélicas comidas de carne humana de nuestro sádico protagonista. Una gran película de culto para disfrutar en familia.
La película se ve bastante bien y además tiene subtitulos en inglés. Pasen y vean solo los más atrevidos y las mentes más enfermas.
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